En español es común encontrarnos con este tipo de palabras: «coger» y «tejer», que son homófonas en la segunda sílaba (se pronuncian con el sonido j [co/jer/, te/jer/]), pero se escriben con distintas letras; por lo que es fácil equivocarnos, si no estamos demasiado familiarizados con esta lengua, a la hora de escribir, e incluso conociendo el idioma puede que alguna vez dudemos de si una palabra se escribe con g o j. Así que en este artículo vamos a aprender, con unos sencillos trucos, cuándo usar cada una de estas letras.
Qué palabras se escriben con g
Escribimos con g todos los verbos terminados en -ger, -gir y -gerar: proteger, dirigir, aligerar. Pero ¿entonces por qué «tejer» se escribe con j? Porque es uno de los verbos que no siguen esta regla. Ocurre lo mismo con «crujir». La explicación de por qué tejer se escribe con j viene de que en latín este verbo era texere y la x da lugar a la j. Del verbo crujir no puedo ofreceros ningún dato porque se desconoce su origen; así que toca memorizarlo, sin más.
RESUMEN:
CON G: TODOS LOS VERBOS QUE ACABAN EN -GER, -GIR Y -GERAR.
EXCEPCIONES: TEJER Y CRUJIR.
Usamos la letra g delante de -ue- o -ui-, es decir, -gue- y -gui-: guitarra, aguinaldo, águila, gueto, guepardo. En este caso, el sonido de la g es suave, igual que cuando decimos gato, goma, gusano… Y la u que hay en medio no se pronuncia.
Escribimos con g los adjetivos y sustantivos que contengan la sílaba gen en cualquier lugar: generador, sumergen, emergencia. Excepto «jengibre» y «ajenjo». Estas dos palabras también tendréis que memorizarlas para no equivocaros a la hora de escribirlas.
Todas las palabras que terminen en -gia, -gio, -gión, -gional, -gionario, -gioso y -gírico, como en regia, legionario, magia, regional, religión, contagioso, panegírico. Las excepciones, en este caso, son «lejía», «bujía» y «herejía». Memorizadlas también y no tendréis ningún problema.
Escribimos con g las palabras que empiezan por geo-: geología, geometría, geografía.
Qué palabras se escriben con j
Escribimos con j los verbos terminados en -jar: bajar, cejar, cobijar, etc.
Escribimos con j aquellas palabras derivadas cuya raíz lleva esta letra: avejentar (de viejo), enjabonarse (de jabón), etc.
Las palabras que contengan las sílabas ja, jo, ju: teja, ajo, júbilo.
Las palabras que terminen en -aje, -jero, -jera y -jería: sabotaje, consejero, relojera, conserjería, etc. Aquí encontramos unas cuantas excepciones: ambages, auge, cónyuge, enálage, esfinge, falange, faringe, Jorge, laringe, litarge, meninge, vergé, ligero, flamígero, así como coge, dirige y elige, que son palabras derivadas de verbos terminados en -ger y -gir.
Escribimos con j los verbos que acaban en -jear: cojear, carcajear, ojear, forcejear, etc.
Usamos la j en las palabras que empiezan por eje-: ejecutar, ejercicio, etc.
Todas las formas verbales cuyo infinitivo se escribe con j: quejáis (de quejarse), alejándose (de alejar).
Escribimos con j los sonidos [je], [ji] de los tiempos pasados irregulares de los verbos cuyas formas infinitivas carecen de j: trajisteis (de traer), conduje (de conducir).
Todas las palabras derivadas de las palabras que contengan ja, jo, ju: verjita (de verja), naranjazo (de naranjo).
Por último, las palabras cuyo sonido final es una j: reloj, boj, carjaj.